Una persona siembra un pensamiento y

recoge una acción.

Siembra una acción y recoge unos hábitos.

Siembra un hábito y recoge un carácter.

Siembra un carácter y recoge un destino.

(Joan Ginés)


A los Sres. Presidentes y –por su intermedio- a los miembros de las Comisiones Directivas, Consejos y demás colaboradores que participaron de la organización del acto del 27:
Porque los grandes temas que se pusieron en el tapete el 27 de mayo, son temas que han recibido respuestas ya desde la modalidad del acompañamiento, ya desde adhesiones o repercusiones.

La FAM se ha afirmado una vez más como una entidad sólida, activa y comprometida. Salió con el intento de dar soluciones a problemas de prioritario tratamiento y nuestras manifestaciones alcanzaron una escucha máxima.

Más de doscientas notas de prensa -escrita, radial y televisiva, nacionales y provinciales- nos permitieron avanzar en el posicionamiento institucional.

La respuesta lograda, tanto en el número de magistrados y funcionarios, como en la representatividad a lo largo y ancho del país, nos colocan como interlocutores obligados en los temas de justicia.

Las proyecciones se ven en las adhesiones recibidas, antes y después del 27, del Poder Legislativo de la Nación, del Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, de los distintos Poderes de varias provincias, de FACA, de Gremios, de ONGs., etc.

Todo esto se logró porque hubo una disposición unánime para la realización del esfuerzo para concretar el acto del 27 de mayo, y se trabajó desde y a través de una conciencia integradora e influyente La unidad nos dio la fuerza y dimensión necesaria para el logro de ser escuchados en nuestro aporte.

Una pequeña y gran victoria como ésta genera aún más fuerza y es motivo de fe y alegría, porque el 27 dimos un paso al frente.

El próximo paso será evaluar -entre todos- lo acontecido, y delinear (en una reunión al efecto) las acciones subsiguientes, tanto en los niveles locales como en el nacional.

Afectuosamente

Abel Fleming